viernes, 29 de octubre de 2010

¿INDEPENDENCIA DE ESPAÑA O DEL AL-ANDALUS?

Con este artículo no pretendo tratar el tema concreto de la Independencia de Cataluña. Sólo me gustaría dejar constancia de un hecho que todos el mundo debería tener en consideración.
                        
Por el camino que van los hechos, tanto en España como en Cataluña, la pregunta del título cobra cada vez mayor trascendencia.
Para intentar que se te entienda lo que querría plasmar, debemos partir de una hipotética situación, que puede que suceda o puede que no. Suponemos por un instante que dentro de “x” años la situación ha cambiado y la independencia de Cataluña respecto a España es posible, es decir, que todas las parte se han puesto de acuerdo y consideran que es lo mejor para todos. Suponemos que el ejército español lo acepta, la Unión Europea da su visto bueno, etc.
Con esta hipótesis de partida, la independencia de Cataluña respecto a España sería un hecho.

Pero la realidad sería diferente. Con la actual sucesión de acontecimientos, con el beneplácito de nuestro gobierno (perdón, quería escribir “desgobierno”), con el consentimiento de algunos, con la postura demasiado permisiva de otros, con la impagable ayuda de muchas asociaciones (que no se dan cuenta de que las utilizan para sus maquiavélicos fines)... cuando llegara el momento del cuál hablaba en el párrafo anterior, sería imposible que Cataluña se independizara de España. Y os preguntareis: “¿Pero si acabas de escribir que todas las partes están de acuerdo?” La respuesta es muy simple: Cataluña no se podría independizar de España porque ya no existirían ni Cataluña ni España. España sería Al-Andalus y Cataluña sería un Califato.

Por este motivo las próximas Elecciones al Parlamento de Cataluña son quizás más trascendentes que nunca. Porque su resultado sentará las bases de nuestra sociedad para los años venideros.

Por eso os pido efusivamente que votéis PxC, para evitar la islamización definitiva de Cataluña y de España, de España y de Cataluña; el orden no importa. Esta es una batalla que debemos de ganar juntos, por bien común.

Sólo existe una alternativa para enderezar el rumbo: votar PxC. Votar Anglada.

¡Viva PxC!
¡VIVA ANGLADA!

lunes, 25 de octubre de 2010

TODOS TEMEN ANGLADA

¿Quién tiene miedo del señor Anglada? Yo no, al contrario, espero como agua de mayo su entrada en el Parlament.
Y, como yo, hay muchas persones que esperan este suceso ilusionadas. Porque, por primera vez en mucho tiempo, tenemos la ilusión de poder cambiar la forma de hacer política que actualmente llevan a cabo todos los partidos políticos. Porque, por primera vez en muchos años, existe una opción diferente, una alternativa a la casta política podrida y parasitaria.
Somos muchos aquellos que votaremos PxC. Más de los que algunos partidos se imaginan. Y muchos más de los que ellos desearían.

Entonces, ¿quién teme a Anglada?
Los que tienen algo que esconder.
Aquellos que no desean que se sepa la verdad de muchos asuntos.
Quienes se verán perjudicados si la verdad sale a la luz.
Aquellos a quines ya les va bien que todo continúe igual, mientras ellos sigan obteniendo pingües beneficios.
Aquellos que saben que perderán un montón de votos a favor de PxC porque sus ex-votantes se han dado cuenta (más vale tarde que nunca) que no era aquella la opción correcta para el bien de todos.
Y muchos más.
Ya que son muchos quienes viven la mar de bien, son muchos los que temen Anglada. Y por eso se lo inventan todo con tal de ponerle piedras en su camino hacia el Parlament.

El candidato Puigcercós dijo hace pocos días que CIU debería volver al notario, esta vez para certificar que no pactará ni con el PP ni con PxC. De semejante afirmación se puede deducir lo siguiente:
Que Puigcercós no ha entendido que esta vez Mas no irá al notario porque puede que sea su última oportunidad de ser President (“governor”, como le dijo a Scarlett Johansson) Si no lo consigue esta vez, quizás no lo consiga nunca.
Que Puigcercós ya da por seguro que CIU ganará las Elecciones.
Que, basándose en las encuestas internas que manejan los partidos grandes, Puigcercós sabe realmente que PxC entrará en el Parlament.

Este último aspecto nos debe motivar todavía más para votar PxC y para intentar captar aún más voto para el señor Anglada. No únicamente para que entre en el Parlament, sino para que obtenga la mayor representación posible. Ahora es el momento de votar Plataforma per Catalunya.

Porque votar aquellos que temen Anglada supone apoyar a quienes ya les va bien que todo continúe como hasta ahora (crisis, paro, inmigración masiva y descontrolada...) A ellos ya les va bien todo esto, porque ellos no sufren ninguno de los inconvenientes (no están en paro, no sufren la crisis, no tienen vecinos inmigrantes...) pero, en cambio, sí se ven beneficiados por otros muchos aspectos asociados al poder (los cuáles no hace falta ni mencionar porque todos los conocemos)

Por todo esto, el próximo 28 de Noviembre, todos debemos votar Plataforma per Catalunya.
Debemos hacer que escuchen nuestra voz.
Nosotros creemos en PxC.
Nosotros apoyamos al señor Anglada.
Porque un cambio en la manera de hacer política es posible.
Porque un cambio es necesario.

¡Viva Plataforma per Catalunya!
¡VIVA ANGLADA!

viernes, 15 de octubre de 2010

DENUNCIEMOS EL BOICOT MEDIÁTICO

Es “vox populi” el boicot mediático a que se ve sometida Plataforma X Cataluña.
Desde hace unos meses los medios de comunicación la tienen sometida a un silencio absoluto. No sólo no se mencionan las actividades de PxC, sino que le cierran las puertas de allí donde participaba con asiduidad. Extraoficialmente, algunos periodistas confiesan las presiones recibidas por diversos partidos.
El silencio es tal que en la mayoría de medios ya no se pronuncian las siglas PxC y mucho menos el nombre de su líder. Cuando hacen alguna referencia a él hablan del “partido xenófobo”, de la “formación de Vic”, etc.
Y cuando, raramente, es invitado el señor Anglada a algún medio, montan un estudiado complot para no dejarlo hablar y para intentar que quede en evidencia, yendo todos los tertulianos contra él a la par, como si de un enemigo común se tratara.
Este hecho tuvo lugar el pasado 04/10/10. El señor Anglada fue invitado al programa “Cataluña Opina” de Canal Català TV, que presenta el señor Carlos Fuentes. El programa se convirtió en un espectáculo que no sabría si calificar de surrealista, esperpéntico o, simplemente, como penoso.
Los invitados de aquel día eran, a parte del señor Anglada, Carlos Navarro (ex-Gran Hermano), la abogada y periodista Carme Freixas y la abogada Lídia Falcón.
Carlos Navarro habló poco. Y al señor Anglada no le dejaron decir mucho, entre el presentador y las dos fieras. Las dos mujeres parecían fieras feroces que acababan de escaparse de su jaula y hacía días que no probaban bocado. Se dedicaron todo el programa, única y exclusivamente, a interrumpir y dinamitar cualquier intervención del señor Anglada.
Incluso el presentador le echó en cara al señor Anglada que creyera que estaba vetado. Este programa fue una pantomima orquestada para que el señor Anglada no pudiera quejarse de no ser invitado; pero invitarlo y no dejarle hablar es casi lo mismo.
El programa tuvo diversos momentos álgidos. Uno de ellos tuvo lugar cuando el señor Anglada hablaba de un chico negro que habían contratado para un trabajo determinado. El señor Fuentes enfureció por escuchar la palabra “negro”. Respecto a este hecho, yo he escuchado la opinión de muchas personas negras que prefieren esta palabra a la expresión “de color”, la cuál creen peor.
Pero también acaeció otro hecho, quizás incluso peor, que dice mucho respecto al talante del monje que presenta el programa. Siempre que se emite este programa (y hace muchos meses que se emite) los espectadores pueden enviar mensajes de texto para expresar su opinión. Pero este día no recibieron mensajes, ni tampoco llamadas telefónicas en directo (como hacen en muchas ocasiones). Al final del programa, el presentador lo justificó diciendo que aquel día lo habían hecho de esta manera para realizar un programa diferente. Pero se notó que en realidad se habían inventado esto para evitar los abundantes mensajes de apoyo al señor Anglada. Al día siguiente ya se podía llamar por teléfono y enviar mensajes con normalidad. Sólo faltó que al decirlo se le escapara: “Hoy no hemos permitido que enviaran mensajes para evitar que estos fueran de partidarios del señor Anglada”. ¿Esto no es tener mala baba? ¡Y todavía se atreve a decir que el señor Anglada no está vetado! ¡Esto es peor que estar vetado!

Pero el boicot mediático no acaba aquí. Otro ejemplo se produjo el pasado 28/09/10 en el programa “59 segundos” de TVE-2, en desconexión para Cataluña. Hablaban de las nuevas formaciones políticas que se presentarán a las Elecciones. En el inicio, la presentadora, cuyo nombre no recuerdo pero sí que recuerdo que aparecía en el programa “El Club” de TV-3, dijo que hablarían del partido de Laporta, del de Carretero, del de la señora Nebrera, del de Rosa Díez (que entonces todavía no había elegido su candidato) y de otros. Yo creía que en este apartado de ”otros” estaría incluida PxC. Pero en ningún momento nombraron al señor Anglada. Únicamente en un instante uno de los tertulianos nombró “Plataforma X Cataluña”.
Y entre aquel cúmulo de despropósitos destacó un momento del debate, cuando uno de los tertulianos iba a hablar sobre la inmigración. En aquel instante, la presentadora (que supongo que creía que no la estaban “pinchando” a ella) hizo ostensibles movimientos con las manos. Deduzco que pretendía evitar este tema “tabú”, para que no apareciera el nombre del señor Anglada. Como dijo Maquiavelo: “El fin justifica los medios”.

Hasta hace un tiempo yo creía que vivíamos en una Democracia en la cuál se aceptaban todas las opiniones, siempre que se expresaran con corrección. Pero me he dado cuenta que no es así. La mayoría de medios de comunicación parecen haber sufrido una lobotomía. Y se han quedado sin capacidad de razonar, hecho que aprovechan los socialistas para inculcarles, como si se tratara de una secta maligna (con todas sus consecuencias negativas), sus dogmas. Y estos medios, faltos de razonamiento y de capacidad para llevar la contraria, los aceptan como mandamiento divino (perdón, en este caso se trataría de “mandamiento ateo”). Tienen nula capacidad de crítica hacía todo aquello proveniente de ciertas posiciones y de ciertas fuentes.

Y yo me pregunto: ¿Queremos continuar siendo gobernados (“desgobernados”, más bien dicho) por esta pandilla de impresentables?

Sólo existe una alternativa para enderezar el rumbo: Votar PxC. Votar Anglada.

¡Viva PxC!
¡VIVA ANGLADA!

viernes, 8 de octubre de 2010

ASPECTOS A TENER EN CUENTA

- Podemos hablar de “moros” sin hipocresía. Resulta difícil distinguir entre argelinos y marroquíes y la solución consiste en  utilizar la palabra “moros”. Y aquellos que nos tildan de racistas cuando usamos este término deberían tener ciertos conocimientos históricos. Los romanos llamaron “mauros” (moros) a los norteafricanos. Y Mauritania significa “tierra de mauros”, es decir, “tierra de moros”. Las cosas se deben decir por su nombre.

- Los conceptos de derecha e izquierda, políticamente hablando, son conceptos que ya han caducado. Su origen se remonta al siglo XVIII, a la época de la Revolución Francesa, cuando los miembros de la Asamblea se dispusieron a derecha e izquierda. Pero, actualmente, cuando tales conceptos resultan más caducos, es cuando parecen llevar incorporado un mayor componente positivo o negativo. Actualmente todo aquello que provenga de la derecha es “malo” y todo lo que proviene de la izquierda es “bueno”. Y este significado cada vez parece extenderse más. Pronto escucharemos frases como “hoy me duele la pierna mala”, refiriéndose a la pierna derecha. O “hoy parece que me haya levantado con el pie bueno”, refiriéndose al pie izquierdo. Pero esta última afirmación sería del todo incongruente, ya que siempre se ha entendido la frase “me he levantado con el pie izquierdo” en sentido negativo y, en cambio, ¿ahora tendría sentido positivo? Nos veríamos obligados a cambiar el refranero popular. Y el súmmum se produciría dentro de poco cuando estuvieras conduciendo tu vehículo y el GPS te dijera: “A cien metros... gire... a la mala”.

- La frase “aquí no cabemos todos”, tanto si se quiere reconocer como si no es así, resulta ser una verdad absoluta. Me atrevería a decir que es un hecho tan obvio que no haría falta ni decirlo, si no fuera por el “bonismo” exagerado que ha pretendido hacernos creer lo contrario. Nos han querido inculcar que vivimos en un cuento de hadas. Pero nada más alejado de la realidad. Por ejemplo, en un recipiente de dos litros de capacidad, ¿caben todos los litros que queramos? No, está claro. Pues con todo lo que podamos pensar sucederá lo mismo. Todo tiene un límite de capacidad (una botella, un bote, un contenedor, un país...) Todo, absolutamente todo, tiene un límite; que será mayor o menor, pero tendrá un límite.

- La inmigración debe controlarse. Pero no únicamente es necesario controlar la inmigración, hoy en día todo está controlado, y por suerte para nosotros es así. Existen controles alimenticios. Los productos pasan estrictos controles de calidad. Cuando yo iba a la escuela, de vez en cuando teníamos “controles”, una especie de exámenes pero de menor importancia. ¿Para qué servían? Para comprobar que íbamos siguiendo las explicaciones con normalidad y que íbamos asimilando los contenidos. Todos estos controles, y muchos más, son necesarios.

- Los partidarios de PxC no somos contrarios a la inmigración. La inmigración siempre ha existido y siempre existirá. Nosotros estamos a favor de la inmigración que sea necesaria. Únicamente pedimos que se cumplan las leyes. La Ley de Extranjería estipula claramente que los inmigrantes “ilegales” (es decir, “no legales”, la misma palabra lo deja claro) deben ser repatriados a sus respectivos países de origen. Y si una Ley lo marca claramente, ¿por qué razón no se cumple?

- El no-empadronamiento de los ilegales, es de estricta lógica. Responde al mínimo criterio de imperio de la ley. Los ilegales no pueden ser legalizados, no tiene sentido. La misma palabra lo explica: “ilegal” significa “que no es legal”, “que está fuera de la ley”. Y todo aquello que no sea legal debe ser perseguido y debe actuarse en consonancia a la legalidad vigente.

- Todo derecho comporta unas obligaciones adheridas a él. Pero esto parece no ser así para algunos inmigrantes. Y la obligación del Estado es hacer cumplir las obligaciones, tanto a los autóctonos como a los inmigrantes. El hecho de ser inmigrante no es ningún eximente para no tener que cumplir las obligaciones.

lunes, 4 de octubre de 2010

RAZONES PARA VOTAR ANGLADA

PORQUE PRETENDEN OCULTARNOS LA REALIDAD


Los medios de comunicación a veces nos engañan o no nos muestran toda la realidad. Sólo muestran la realidad sesgada, des del punto de vista del “bonismo” exagerado instaurado por la izquierda en nuestra sociedad.
Hace pocos días pude leer, con estupor por mi parte, un artículo en el cuál se afirmaba, sin pudor alguno, que cuando los inmigrantes llegaron a España nosotros vivíamos en viviendas que eran poca cosa más que simples chabolas. Y ellos construyeron todas las viviendas que existen actualmente en nuestro país.
Esto resulta ser una gran estupidez, quizás la mayor que he leído nunca. Y lo peor es que si alguien se atreve a escribirlo es que quizás se lo cree Y si se cree esta animalada seguramente también se debe creer otras.

Y existen muchos aspectos que no se comentan aunque sean totalmente reales, o que poca gente se atreve a explicar porque quizás no sea “políticamente correcto”.

Por ejemplo, no se comenta mucho la realidad de la distribución actual de las viviendas. Cuando los inmigrantes comenzaron a llegar, de forma cada vez más masiva, no existían tantas casas adosadas como ahora. ¿Por qué razón se pusieron tan de moda? La respuesta es muy simple. Cuando las personas autóctonas que vivían en bloques de pisos comenzaron a convivir con los inmigrantes, se dieron cuenta de las dificultades de convivencia que aparecían. Además del choque de culturas, había otros factores. Sufrieron algunas de las “costumbres” más arraigadas en muchos de ellos (no en todos, claro está), sobre todo de ciertas procedencias: no pagar las cuotas de la Comunidad de Propietarios, dañar los espacios comunes, ensuciar y no limpiar, no hacer caso de lo que se les dice... Y entre todos estos factores provocaron que las personas que económicamente se lo podían permitir decidieran adquirir una de estas casas adosadas; para poder vivir sin este tipo de vecinos en el mismo edificio. Ésta era la única opción que se lo aseguraba, ya que también podían haber ido a vivir a otro edificio de pisos donde no vivieran inmigrantes; pero podía suceder que un tiempo más tarde fueran a vivir también allí, como después sucedió. No hicieron la mudanza por placer, sino por necesidad.
Con el paso del tiempo más personas autóctonas eligieron esta opción, tan pronto como les fue posible. Y de los que todavía no lo han hecho, la inmensa mayoría sueñan despiertos que les toca la lotería y también pueden realizar este cambio. Sólo el destino sabe si este acontecimiento se producirá en el futuro, o no.

Pero esto no lo explican en las noticias. No aparece en los periódicos. La gente no se atreve a comentarlo por la calle porque si se quejan reciben siempre la misma respuesta: “Pues cambia de vivienda”. Pero ésta no es la solución. Esto es hacer como un avestruz y esconder la cabeza bajo el ala. Lo único que hacen con esto es mirar hacia otro lado. Pero el problema continúa estando allí. Y cada vez se hace mayor. Y entonces son cada vez menos las personas que quedan viviendo en barrios “invadidos”.
Y esto no es racismo. No es xenofobia. Es la realidad. La pura y dura realidad. La realidad que día tras día sufren en silencio muchas y muchas personas. Y muchas de ellas son personas de edad avanzada que no pueden cambiar de vivienda. Y lo sufren en silencio porque no se atreven a quejarse a sus vecinos por temor a que les hagan algo. Porque son ya mayores, en muchos casos están enfermas, y no quieren enfrentamientos, ya que se encuentran solas y se sienten indefensas.

Las personas que les apoyan cambiarían de opinión si tuvieran que convivir con ellos. Pero, como no es así, les defienden.
Los políticos y las personas que les apoyan viven en sus casas más o menos lujosas, en barrios de alto standing, en urbanizaciones “pijas”. Pero en ninguna de estas ubicaciones tienen vecinos inmigrantes.
Muchos políticos únicamente ven a los inmigrantes en las reuniones o encuentros “multiculturales” o de la “alianza de las civilizaciones”; chorradas inventadas por los socialistas. Allí todo son risas y buenas palabras, pero cuando los políticos se dan la vuelta, ellos hacen lo que les da la gana, como siempre.

Yo invitaría a estos políticos, miembros de Cáritas y otras asociaciones que única y exclusivamente ayudan a los inmigrantes (ver mi tercer artículo, titulado “Un caso real”, y los que próximamente publicaré), a convivir unos cuantos días en los pisos de todas aquellas personas que sufrimos sus “costumbres”. ¡Veríais como pronto cambiarían de opinión!
Esta gente lo defiende todo en nombre de la multiculturalidad. Pero existen muchos hechos que no son fruto de esto, sino de la mala educación o de otros factores. Y que resultan indefendibles. Todo el mundo debe comportarse correctamente, sin que su procedencia tenga nada que ver.

Pero, por suerte, en Cataluña tenemos un político diferente. Un político que se atreve a decir las cosas por su nombre, tal como son. Un político que no se deja vencer por el falso pecado de lo “políticamente incorrecto”. La única alternativa posible.

¿Cuál es su nombre? JOSEP ANGLADA.
¿Cuál es el nombre de su partido? PLATAFORMA POR CATALUÑA.
¿Qué debemos hacer? Votarle todos.

Porque Cataluña se lo merece.
Porque Cataluña ha perdido un prestigio que había costado mucho de obtener, “gracias” al desgobierno de la izquierda.

¡Por nosotros!
¡Por Cataluña!

¡Viva PxC!
¡VIVA ANGLADA!